Antonio Figueras es profesor de investigación del CSIC en el Instituto de Investigaciones Marinas de Vigo. Además de desplegar una intensa actividad investigadora y docente, saca tiempo para la divulgación científica porque considera que la población debe estar informada para tomar decisiones responsables. “No es aterrorizar ni quitar importancia, la gente tiene que conocer la realidad”.

Los científicos vienen alertando desde hace años sobre la presencia de los microplásticos. En una escala de 1 a 10 ¿hasta que punto es preocupante?

Probablemente estaríamos en 25. La situación del planeta es muy preocupante, pero se está haciendo tan poquito que cada vez es peor. Tenemos que empezar a ver que tenemos plásticos, microplásticos y nanoplásticos. Estos dos últimos no los vemos, están por todas partes, los estamos respirando. No somos conscientes de la cantidad de plásticos que utilizamos. Te hago yo una pregunta: ¿Cuánto tardas en llenar una bolsa de basura en casa y cuánto ocupan los plásticos?

La bolsa donde tiro los plásticos es más grande que la de materia orgánica.  ¿Es materia inerte?

 La gente cree que el plásico que envuelve la carne o la fruta que compras es inerte, pero no lo es. Está constantemente goteando en lo que le rodea y eso acaba en nosotros. Por eso es tan importante la escala. La botella de plástico la ves, pero no eres consciente de los micro y los nanoplásticos que nos rodean y nos atacan por todas partes.

Los estamos comiendo y bebiendo. Están en la placenta, en los pulmones, en las heces porque estamos consumiendo plástico de forma inconsciente. Nadie quiere hacerlo. Cuando comes fruta no quieres comer lo que la envuelve tanto tiempo hasta que llega a tu casa. ¿Qué hacen los plásticos cuando llegan a nuestro cuerpo? No son inertes, interactúan con nuestro sistema reproductor, con nuestro sistema inmune y los efectos se están empezando a ver, probablemente sean más acusados dentro de unos años. En un momento dado quizá el médico de cabecera te pregunte en la consulta: ¿cuánto plástico tienes en casa?

¿La ciencia está estudiando esos efectos?

La ciencia medioambiental, la ciencia biomédica están volcadas en esta dirección. Ahora hay muchos frentes abiertos, los plásticos, la cantidad de CO2, el hambre, los virus, las guerras. Vamos como pollos sin cabeza y es difícil realizar una acción sincronizada para que esta generación impulse un cambio que a lo mejor empieza a ver sus efectos en 2070 o 2100. ¿Quién va a dejar de usar agua embotellada o fruta envasada cuando nadie lo hace? No soy catastrofista, creo que hay que estar informado e intentar pasar este mensaje para que la maquinaria se ponga en marcha.  Una persona que está haciendo un trabajo de máster relacionado con la educación contaba que los niños identifican los plásticos como el mayor problema del océano. Está calando, ahora hay que educar en cómo se resuelve el problema y cómo nos desenganchamos de esta adicción que tenemos al plástico.

¿No se está cumpliendo la directiva que obligaba a reducir el uso de plásticos?

Creo que no, además es un loby potentísimo. Luego vino la pandemia, luego la guerra. El mundo está desbaratado, a ver si en algún momento se hace. Los objetivos de 2030 son absurdos, es imposible descarbonizar y a desplastificar en ese año. Hay que poner metas realistas y educar sobre cómo hacer, pero tiene que haber voluntad planetaria de hacerlo porque si no estaremos más cerca del precipicio y cuando empiecen a caer los primeros no tendremos tiempo a reaccionar.

Por supuesto. Hay plástico en la Antártida, en el Ártico, en los animales, en todas partes. Aunque no lo creas nos llueve plástico.

¿Qué podemos hacer a título individual?

Reutilizar todo lo posible los objetos de plástico, usar las bolsas que nos dan muchas veces y eliminarlas en las zonas adecuadas de la recogida de basuras. Y utilizar poco. Tiene que haber un balance entre los beneficios económicos y el bienestar de la población. Si extiendes la vida útil de las cosas la economía se va a resentir porque habrá menos consumo y si hay menos consumo hay menos empleo. Es una carrera de ratas que nadie quiere romper. Hay que poner metas creíbles y hacer ver que el mañana es el 2070 o el 2100 porque nuestros nietos se van a beneficiar. Si no cala el mensaje y se impone el egoísmo de la especie humana y “el que venga detrás que arree” cuando se escriba la historia de estos años en el futuro hablarán de nosotros como aquellos inconscientes, sucios, insolidarios, y nos llevaremos esa medalla a la tumba.

Participó en el seguimiento de covid en las aguas residuales. ¿Cómo ve la pandemia?

La pandemia está descontrolada. No hay tantos fallecidos, aunque son bastantes para mi gusto, pero el covid está en proceso de gran expansión. Hay muchas incertidumbres, pero va a seguir como la gripe de 1918 que tuvo coletazos en 1921 y 1922. Es el devenir de cualquier pandemia. En esta la ciencia nos permitió tener una respuesta admirable en poco tiempo, pero está lejos de estar controlada. Esta mañana leí que en las aguas residuales de Reino Unido se detectaron virus activos de la polio, que está erradicada. La ciencia nos muestra que tenemos muchos agujeros en la civilización tan avanzada en la que estamos viviendo.

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