La afirmación la hizo el mandatario paraguayo Mario Abdo Benítez. El medio argentino La Nación reseñó que el rumor circulaba desde hace una semana en Buenos Aires, pero no existía algún dato concreto registrado en la causa que adelanta en el juzgado federal de Lomas de Zamora. Se trataría de Mohammad Khosraviragh, de 39 años de edad, quien se encuentra en Ezeiza desde el 6 de junio pasado, cuando aterrizó en Buenos Aires la aeronave adquirida por Emtrasur de Mahan Air

Un tripulante iraní del avión venezolano que sigue retenido en el aeropuerto internacional de Ezeiza, en Buenos Aires, Argentina, se hizo una cirugía plástica en Cuba para cambiarse el rostro. Así lo reveló el presidente paraguayo Mario Abdo Benítez, y expresó que el caso, que está bajo investigación judicial, parece una película.

“Gran parte de esa tripulación tiene vínculos con el terrorismo internacional. Uno inclusive se operó para cambiarse la cara en Cuba. Imagínense, parece una película”, dijo el mandatario a la prensa durante un recorrido por las sedes que albergarán en octubre próximo los Juegos Suramericanos de Asunción 2022.

Benítez aseguró que más cosas se sabrán en el tiempo sobre el avión y reconoció que los servicios de inteligencia de su país han hecho “un gran trabajo” para determinar la peligrosidad del vuelo. “Desde que Paraguay informó y alertó, se pudieron hacer las averiguaciones”, manifestó el mandatario.

El régimen de Irán acusó de hacer comentarios sionistas a algunos funcionarios de Paraguay, incluyendo al ministro del Interior y de Inteligencia. “Plantearon acusaciones vanas e infundadas contra los tripulantes iraníes de dicha aeronave, que nunca han sido acordes con el antecedente de las relaciones amistosas entre nuestros países”, señaló una nota de la Embajada de Irán en Montevideo.

Ante esas afirmaciones, el presidente Benítez dijo que no le preocupa las declaraciones de Irán y recordó que Paraguay tiene un compromiso decidido en la lucha contra el crimen internacional, sin importar el país que esté involucrado. “No es una cuestión contra ningún país. La lucha es contra el crimen internacional y el terrorismo”.

El avión era de la empresa iraní Mahan Air. Pertenece actualmente a Emtrasur, filial del estatal Conviasa.

El medio argentino La Nación reseñó que el rumor de que el iraní se había cambiado el rostro en Cuba circulaba desde hace una semana en Buenos Aires. Pero no existía algún dato concreto registrado al respecto en la causa que adelanta en el juzgado federal de Lomas de Zamora.

Se trataría del tripulante Mohammad Khosraviragh, de 39 años de edad, quien se encuentra en Ezeiza desde el 6 de junio pasado, cuando aterrizó el avión venezolano.

“Quienes sostienen esta hipótesis difunden una imagen del pasaporte presentado por Khosraviragh en Ezeiza y otra foto de una credencial. En teoría, corresponde al copiloto del avión de Emtrasur. No se parecen a simple vista. Pero las fuentes que promueven esta versión indican que se trata de la misma persona porque así lo prueban análisis de reconocimiento facial e inteligencia artificial”, señaló La Nación.

Agregó que sobre la figura de Khosraviragh pesa una sospecha registrada en una denuncia judicial de los diputados Gerardo Milman y Ricardo López Murphy. Pidieron al juez de la causa que se investigue su verdadera identidad.