Los empleados de una cafetería Starbucks ubicada en la localidad de Corpus Christi, en el estado norteamericano de Texas, escribieron un mensaje en uno de sus vasos de papel a una chica de 18 años preguntándole si necesitaba ayuda cuando vieron que un desconocido se le acercó y parecía estar acosándola.

Uno de los camareros se acercó a la joven para entregarle un “un chocolate caliente extra” a la joven con la excusa de que otro cliente lo había “olvidado recoger”. En uno de los lados del recipiente, donde normalmente se pone el nombre de la persona que hace el pedido, había un mensaje "secreto" escrito a mano con un rotulador.

“¿Estás bien? ¿Quieres que intervengamos? Si es así, quita la tapa del vaso”, se podía leer en la fotografía que Brandi Roberson, madre de la joven compartió en Facebook. La publicación se volvió viral, acumulando más de 90 mil me gusta, antes de que decidiera eliminarla para proteger la identidad de su hija.

Según contó ella misma, su hija estaba sola en el local tomando un café mientras estudiaba cuando un hombre que no conocía de nada se acercó para hablar con ella. Al parecer quería saber qué estaba estudiando y, de pronto, empezó a elevar la voz y a ser “muy ruidoso”, algo que alarmó al personal de la cafetería.

En cuanto leyó el mensaje en su bebida, la estudiante de secundaria “miró hacia arriba y vio a varios camareros mirándola, listos para intervenir”. Afortunadamente, el hecho no pasó de ser un susto y la chica no tuvo la necesidad de quitar la tapa, haciéndoles saber a los trabajadores que se sentía segura y no necesitaba ayuda.

“¿Estás bien? ¿Quieres que intervengamos? Si es así, quita la tapa del vaso” decía el mensaje

Tras lo ocurrido, Brandi agradeció el gesto de los empleados por velar por la seguridad de sus clientes. “Me hizo sentir muy agradecida que los camareros de Starbucks la estuvieran cuidando. Como madre, mi peor temor es que algo le suceda a mi hija y nadie esté allí para ayudarla”, dijo la madre en declaraciones al diario estadounidense Today.

Los empleados de una cafetería Starbucks ubicada en la localidad de Corpus Christi, en el estado norteamericano de Texas, escribieron un mensaje en uno de sus vasos de papel a una chica de 18 años preguntándole si necesitaba ayuda cuando vieron que un desconocido se le acercó y parecía estar acosándola.