Las tortillas son un básico en las mesas mexicanas, pero existe un pan que también es imprescindible en muchas comidas. Algunos lo aman completo, otros solo la corteza y otros más su interior. Además es muy versátil, se puede rellenar, se usa para acompañar otros alimentos y también se chopea, así es: el bolillo.

Y es que cada parte de este pan es disfrutable de manera diferente. No obstante, la desventaja es que el bolillo y otros paneles de tipo artesanal suelen resistirse, aguadarse o hacerse chiclosos rápidamente. Por ello en Menú te damos algunos consejos sobre cómo mantener frescos los bolillos por días.

Los bolillos son ese pan que todos conocemos. Larousse Cocina los define como un pan salado de trigo, con forma similar a un rombo, que tiene una hendidura en el centro. Crujientes por fuera y suave y esponjosa por dentro. Una delicia total.

Debes saber que la elaboración de este pan y su utilización como un alimento base en la dieta diaria de los humanos data desde la edad de piedra. Aunque, por supuesto, como detalla Larousse Cocina, no era como lo conocemos actualmente.

Con el paso de los años este pan evolucionó hasta ser lo que hoy conocemos y disfrutamos. No obstante, a pesar de que actualmente los bolillos llevan ingredientes que les ayudan a prolongar su vida, proceso que, por cierto, surgió durante las guerras napoleónicas debido a la necesidad de transportar el pan a donde se encontraban los soldados, explica Larousse Cocina, la realidad es que aún con estos aditivos que ayudan a su conservación el truco para mantener los bolillos frescos por más tiempo está en el almacenamiento. 

Toma tus bolillos y prepárate para darles más tiempo de vida con estos consejos:

Temperatura. Comencemos por el hecho de que un bolillo sin conservadores puede tener entre tres y cuatro días de vida útil, según Healthline. En el tiempo de conservación influye la temperatura. Es así que, según se detalla en su sitio web, un pan almacenado en un ambiente cálido y húmedo tiene más probabilidad de generar hongos y pudrirse. Eso quiere decir que es mejor mantener los bolillos a temperatura ambiente o fría.

Papel y panaderas. Larousse Cocina recomienda guardar los bolillos a temperatura ambiente en una panadera o en una bolsa de papel o tela, también puedes envolver las piezas con un paño de cocina limpio, el truco es no dejar que alguna parte quede expuesta. 

Después coloca el pan lejos de los espacios calientes de tu cocina, como la estufa o el horno. De este modo, no perderán su textura crujiente ni se hará duro durante 2 días como máximo. Eso sí, si lo has tenido días guardado, revisa bien que no se haya formado ningún hongo antes de consumirlo. 

Al refri. También puedes llevarlo a refrigeración envuelto en papel aluminio o plástico. Sin embargo, la recomendación es solo ponerlo en el refrigerador si es que planeas tostarlo en los cinco días siguientes.

La razón de lo anterior es que si bien el frío mantendrá en buen estado el pan, este cambiará su textura y se hará más seco, por lo que no podrías obtener el mejor sabor, pero tostado seguro te encantará.

No plástico. Muchas veces cometemos el error de utilizar bolsas de plástico pero, además de no ser la opción más ecológica, estas no permiten que el pan respire de forma apropiada, haciéndole perder sus propiedades y propiciando una rápida descomposición, por ello la Pastelería Alcázar sugiere guardarlo en una bolsa de tela y colocarlo en un recipiente o panera con orificios, lo cual permitirá una buena circulación del aire que ayude a mantener fresco el bolillo.

Congela. En el canal, MasterChef México dan un tip para almacenar tus bolillos por mucho tiempo. Guárdalos en una bolsa de plástico o en un recipiente con tapa hermética e introdúcelo en el congelador. Cuando desees usarlo solo debes retirarlo del congelador dos horas antes, rociarlo con agua y meterlo al microondas por tres minutos o, mejor aún, al horno de la estufa precalentado, esto te ayudará a almacenarlo hasta por dos semanas.

Una recomendación es cortarlo en pedazos antes de congelarlo, de esta manera podrás sacar solo las rebanadas que necesites y podrás almacenar el resto del pan por más tiempo. 

Un ingrediente extra. Otro truco que seguro te será útil es agregar un pedazo de papa a la bolsa en la que vas a guardar el bolillo. Esta ayuda a mantener su frescura, aunque podría añadir un poco de sabor, por lo que debes tener cuidado al hacer combinaciones. 

Con estos sencillos consejos los bolillos te durarán frescos por días y podrás disfrutarlos de tu manera favorita sin desperdiciar un solo pedazo. Leer también: Conoce los beneficios del carambolo Recibe todos los viernes Hello Weekend, nuestro boletín con lo último en gastronomía, viajes, tecnología, autos, moda y belleza. Suscríbete aquí: https://www.eluniversal.com.mx/mi-cuenta  

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